La Planificación Estratégica es un proceso gerencial que se efectúa a partir de la formulación de los objetivos cuantificables de corto, mediano y largo plazo; de los medios necesarios para su obtención; y de las medidas de control de ejecución y eventuales planes de contingencia a aplicar en caso de alteración de las condiciones, a lo largo del proceso.
Este documento ofrece la información necesaria para guiar, de la forma más efectiva y eficiente posible, el rumbo de la organización. De este modo, las actividades empresariales se fundamentan en un plan lógico y no en pálpitos.
“El plan estratégico está para una empresa como una brújula para un viajante. Es un verdadero instrumento de orientación, que evita que la empresa navegue al gusto del viento, errante, sin saber por dónde camina”, afirma Antonio Vale, CEO de Value Added Partners.
Además, agrega: “La elaboración de un plan estratégico debe ser programada por sí misma y envolver la estructura de recursos humanos, de forma tal que todos se responsabilicen e impliquen en su implementación, siendo fundamental también que todos conozcan al pormenor los objetivos y caminos trazados por la organización con la que colaboran”.
Value Added Partners, por ejemplo, elabora el plan estratégico para cada uno de sus clientes con el firme propósito de que sirva de guía para los responsables de las empresas para un período de cerca de 5 años. Value recomienda revisar y ajustar periódicamente este plan, con el propósito de mantener su vigencia.
En resumen, la planificación estratégica es vital para el éxito de las organizaciones, sea cual sea su negocio.
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